Los colores evocan ciertas emociones. El rojo llama la atención porque es el color que los ojos ven primero y el que hará que un jardín sea notado.

El amarillo llama la atención y puede significar advertencia. El amarillo de las flores de cempasíchil en el borde del camino puede hacer que la gente camine más despacio y ponga atención.

Al rosado le falta la pasión del rojo pero es más tibio que el azul. Puede variar del brillante rosado al pálido rosado pastel, así que puede se usado tanto como un color excitante o como un color de tibieza.

El azul, es un color común favorito; es fresco y relajante. Es fácil de combinar con otros colores y, cuando se combina con el blanco, puede hacer que los jardines se vean más frescos, ¡aún en un día caluroso!

El blanco, el marfil y el gris medían entre colores. Usted puede usar colores que chocan, tales como el rosado y el naranja, si usted cuidadosamente usa blancos y grises para suavizarlos. El blanco y el gris pueden ser usados solos en un jardín, también. Si trabaja durante el día y solo disfruta su jardín durante la noche, tal vez usted quiera usar tan solo el color blanco en él. Es un color fresco y limpio que se ve muy bien en la noche, y también puede ser usado para delinear caminos oscuros.

El verde ayuda los ojos a relajarse y a recuperarse del cansancio. Los árboles, céspedes y arbustos proveen muchas áreas verdes.

Estudiando la psicología de los colores, usted puede crear jardines que realzan los estados de ánimo y sentimientos, o hacer que un jardín luzca más grande, cercano o más ancho.