Para poder tener éxito en el sembrado de hortalizas a partir de semillas, se tiene que empezar con la preparación apropiada de la tierra. Después que materiales orgánicos son añadidos a la tierra, nivele la superdicie y retire los terrones grandes. No deben haber hendiduras en la superficie de la tierra donde las pequeñas semillas de hortalizas pueden ser enterradas.

Una regla básica es que las semillas tan sélo deben ser cubiertas a una profundidad doble de su diámetro, o a una profundidad definida en el paquete de la misma. Las semillas de hortalizas que son sembradas a mayor profundidad no germinarán. Asegúrese de seguir las indicaciones en los paquetes de la semillas para determinar cuándo plantarlas. Las verduras de temporada fría pueden germinar en tierras de baja temperatura, pero las de temporadas templadas no.

Las semillas pequeñas de hortalizas son, posiblemente, las más difáciles de germinar bajo el intenso sol y secante aire de Colorado. La superficie de la tierra se seca rapidamente, aniquilando los brotes que hayan empezado a crecer pero que aún no han emergido de la tierra. Riegue con frecuencia las plantas de los semilleros, por periodos cortos, durante el periodo de germinación. Los días en que las semillas germinarán están, por lo general, listadas en el paquete se semillas.

Cuando riegue las semillas, tenga cuidado de no desplazarlas con el agua. Un bloqueador de la fuerza del agua o una regadera pueden ayudar a controlar la fuerza del agua al regar. Si se tiene el problema de secado de la cama, considere protegerla con paja, recortes secos de pasto o piezas flotantes de tela.

Las pestes también pudieran destruir las semillas. Por ejemplo, los gusanos del maíz destruirán las semillas grandes de hortalizas tales como maíz y ejotes, particularmente aquellas que germinan lentamente en tierras de baja temperatura. Los gusanos cortadores pueden destruir las plantitas de los almácigos. Los pájaros comerán no sélo las semillas, sino también los brotes de los almácigos y grupos de plantitas también. Para proteger los brotes en el almácigo, asegúrese que sean plantados en la temporada apropiada, y cubra el almácigo con tela flotante.