Las renovadas preocupaciones por el medio ambiente han estimulado el interés por el uso de fertilizantes orgánicos. Como resultado, ahora se debaten las cualidades de los fertilizantes orgánicos versus los manufacturados. Las consideraciones principales para seleccionarlos son el índice de liberación, costo y efectos reconstituyentes en la tierra.
Los fertilizantes orgánicos son procesados comúnmente de varios productos relacionados con las plantas y animales, como por ejemplo plumas de gallinas, abonos de animales y residuos de aguas negras tratados. Estos materiales tienen unos índices de liberación lentos y requieren que los microorganismos descompongan los materiales en formas quémicas que las plantas puedan usar. Aproximadamente la mitad o menos del nitrógeno es liberado para ser usado por las siembras el primer año. Una ventaja significante de los productos orgánicos es el mejoramiento del contenido orgánico, lo que es de gran importancia para tener éxito en la jardinería de las tierras de Colorado.
Los fertilizantes orgánicos son comparativamente bajos en contenido nutricional así que se requieren grandes volúmenes. Los índices de liberación son más lentos en tierras frescas o secas. Si usted depende solamente en materiales orgánicos y la tierra de su jardín es baja en materias orgánicas, prados y jardines, muchas veces, lucirán de un color verde pálido. Esto indica que el nivel de nitrógeno es bajo.
Por el otro lado, los fertilizantes nitrogenados manufacturados están hechos, normalmente, de petréleo o gas natural. tépicamente, los índices de liberación de nitrógeno, en estos fertilizantes, varían de unos cuantos días a algunas semanas, la mayoría de la cual ocurre justamente después de fertilizar. Ellos también requieren algún tipo de interacción con bacterias para que sean procesados. El fosfato y la potasa en fertilizantes manufacturados generalmente son procesados a partir de depósitos rocosos. Los precios son comparativamente bajos o moderados.
Debido a que los fertilizantes manufacturados son relativamente altos en contenido nutricional, solamente se necesitan pequeñas cantidades. La aplicación excesiva causa que las hojas se pongan amarillas o cafés, lo que se conoce como “quemadura”. En tierras arenosas, el nitrógeno excesivo se filtra hacia los mantos acuíferos.
Los dos tipos de fertilizantes pueden contaminar nuestra agua subterrónea, lagos y riachuelos con se riegan o se esparcen en las calles, aceras y entradas de automóviles. Ninguno de ellos contaminará cuando se aplican correctamente en prados y jardines.