La familia de las palmeras incluye unas 2500 especies. Con muy pocas excepciones, las palmas crecen de manera silvestre solamente en las zonas tropicales y subtropicales. Aunque la percepción general es que ellas son de troncos altos solitarios, muchas tienen varios troncos y son bajas, a manera de arbusto. Algunas son como lianas altas, de tallos delgados de muchos metros de largo. Las palmeras varían tremendamente en su apariencia externa, usos y adaptabilidad en su cultivo.
Las palmeras pueden ser usadas como plantas de jardinería en climas templados. También prosperan muy bien en invernaderos y como plantas del hogar. De hecho, pueden ser los elementos principales del jardinero de interiores. Algunas de las mejores palmas para el hogar incluyen coco plumoso, palma Alejandra, palmera botella, chamadorea, palmito, kentia, palmera datilera y palmera bambú.
Para que las palmas prosperen como plantas del hogar, la mayoría requiere alta humedad, luz solar fuerte indirecta y riego total. Incremente la humedad en la casa colocando las plantas en charolas con piedrecillas o colocando un humidificador en la habitación. Cuando vaya a regar, es importante remojar completamente la planta, asegurándose de vaciar la charolita-base una hora después de regarla. Cuando vaya a transplantar la palma, siempre use una tierra para macetas que drene bien. Tenga cuidado de no poner sus palmas en un contenedor muy grande; use una maceta de no más del doble de tamaño que la anterior. Cuando fertilice, use un fertilizante de uso general, siguiendo las indicaciones de la etiqueta, y aplíquelo durante la temporada de crecimiento para poder lograr plantas saludables de buen color en las hojas.