Las plantas de uvas necesitan sol total y apoyo de sus tallos con postes, separadas de las rejas u otras construcciones. El soporte debe ser fuerte, pero lo suficientemente simple para evitar que se enrollen, y haciendo que su poda se dificulte. Plante la vid en tierra que drene bien porque no crecerá en condiciones sobre mojadas. La vid requiere menos nutrientes y menos agua que el pasto, árboles frutales o jardines de plantas.
Plante su vid en un hoyo lo suficientemente profundo como para que la mayor porción de las raíces queden a unos 12 centímetros de profundidad. Estas plantas son muy sensitivas a 2,4-D y no deben ser plantadas donde esta sustancia se use para controlar maleza.
Una buena producción de fruto requiere de una buena técnica de poda. Si la vid crece en una reja o algo parecido, la planta debe ser podada temprano en la primavera, dejando tan solo dos o cuatro buenos tallos. Estos tallos deben contener unos 20 ó 30 brotes cada uno. Después de podar, las superficies cortas exudarán, pero no molestarán la planta.
El frente montañoso de Colorado tiene fuertes vientos, lo cual causa que la temperatura y la humedad fluctúen drásticamente durante el invierno. Solamente las variedades más fuertes deben ser plantadas en estos lugares. Las zonas del oeste, con condiciones invernales más estables, son mejores para producir viñedos vinícolas y otras uvas.
A lo largo del frente montañoso de Colorado, las variedades como la Concord, Perlett y Beta son muy exitosas. Las uvas Concord sin semilla son plantas de producción mediana de fruta, y produce una vid de media resistencia. La Perlett es una variedad europea para producir frutos blancos temprano en la temporada. La fruta de la vid Beta se madura a un color muy oscuro en septiembre y puede ser utilizada para hacer jugo o vino.