Las capas blanquecinas o marrón en las superficies de la tierra de las macetas de las plantas del hogar son una acumulación de sales solubles, cuyo exceso puede quemar el follaje, las raíces y producir problemas con el consumo de agua. El marchitamiento, amarillamiento, y las puntas de hojas marginalmente quemadas, conocido como abrasamiento, son síntomas del exceso de sales solubles.
Las sales solubles también se acumulan en el exterior de las macetas de arcilla, alrededor de los hoyos de drenaje e inclusive en los tallos de las plantas. Las sales vienen de las mezclas de tierra para macetas, fertilizantes, o del agua para regar con altos contenidos de sales. Estas sales suben hacia la superficie de la mezcla de tierra por el proceso conocido como acción capilar, especialmente cuando la maceta está colocada en un platito donde se acumula el exceso de agua cuando se riega la planta. El exceso de sales no puede drenarse de la maceta cuando hay un platito que retiene el exceso de agua y ésta es reabsorbida. El purgamiento de las sales de la tierra es un remedio fácil para las plantas afectadas por el exceso de sales.