Con un cuidado apropiado, la flor de Pascua, la cual decora hogares durante la temporada de Navidad, pueden retener su belleza por varias semanas. Para obtener mejores resultados, elija planas con un follaje de un verde profundo y con hojas completas sin dañar, también llamadas brácteas. Las flores verdaderas son de color amarillo y están localizadas en la base de las brácteas. Las plantas con flores muy cercanas que aún no sueltan su polen durarán más tiempo.

Las flores de pascua se desarrollan mejor en los lugares soleados del hogar y necesitan una luz brillante continua para asegurar su crecimiento. Evite colocarla cerca de las corrientes fría s, calentadores o ventanillas de aire caliente. Para mantener brillante el color de las brácteas, mantenga sus pascuas entre los 10 y los 21 grados centígrados. Las temperaturas más frescas prolongan el color de la brácteas, pero no lo permiten temperaturas por debajo de los 10 grados.

Riegue suficientemente las pascuas cuando lo necesiten. Si su pascua está envuelta en papel decorativo, perfore el papel en el fondo para asegurar un drenaje propio y retiro del agua excesiva.

Para un mantenimiento prolongado de las pascuas, use un fertilizante completo de partes iguales de nitrógeno, fósforo y potasio cada dos semanas. Para estimular el re-florecimiento de las pascuas y que tengan la forma que a usted le interesa, recorte las planta temprano en junio. Al final de septiembre, coloque las plantas en oscuridad total por 14 horas diarias. brácteas de color deben de empezar a aparecer temprano en noviembre y estarán completamente desarrolladas hacia las festividades del Día de Gracias.

Contrariamente a la creencia popular, las flores y las hojas de las pascuas no son ponsoñosas, tampoco son comestibles.