Si usted viera el masivo tamaño de un ramo floral de una amarilis de seis puntas, seguramente usted no la olvidaría. Estas flores de 20 a 25 centímetros vienen en una variedad de colores que incluyen rojo, rosado, naranja, salmón, blanco y bicolores. Las hay miniaturas y dobles.
No podría existir una planta de interiores tan fácil de cuidar como la amarilis, y ellas son aún mejor recibidas porque generalmente florean de medio a tarde en el invierno. La planta se inicia a partir de bulbos que son del tamaño de casi una toronja. Entre más grandes son los bulbos, más grandes y numerosas serán las flores. Los bulbos son vendidos comúnmente en paquetes de flores preplantadas.
Para iniciar un bulbo, plántelo en una mezcla de tierra suelta. Use una maceta que sea tan solo un poco más grande que el bulbo, y posiciónelo de manera que la mitad quede fuera de la tierra. Riéguelo completamente y permita que drene bien. Cuando la tierra está dos-tercios seca, ponga la planta en una rutina de riego. Exponga la planta a al menos medio día de luz brillante, y fertilícela una vez al mes.
En las amarilis estándar, el tallo de donde brotarán las flores, emerge antes que las hojas, crece rápidamente hasta alcanzar unos 20 ó 40 centímetros, y empieza una secuencia de flores que duran hasta un mes. Después de florecer, corte el tallo de flores justamente por arriba del bulbo, pero no corte las hojas.
Si usted planta amarilis para producir flores por muchos años, riéguelas de la misma manera que usted regaría una planta del hogar por el resto del invierno. Durante el verano, usted puede mantener las plantas en interiores en lugares de luz brillante, o puede dejarlas afuera. Asegúrese de continuar fertilizando. Ponga las plantas en el exterior una vez que el peligro de heladas haya pasado, y coloque las macetas en una ubicación de sombra parcial. Temprano en septiembre, regrese las plantas al interior y deje de regarlas.
Corte el follaje viejo, seco y amarillento de los bulbos para permitirles que descansen en la oscuridad por un mes antes de volver a plantarlas en tierra fresca y resuma su riego para iniciar el florecimiento.