Las violetas africanas son las plantas de flor para el hogar favoritas. Ellas se pueden propagar fácil mente a partir de un recorte de hoja, florecen durante todo el año, y se consiguen en muchos colores y formas.
Para cultivar violetas africanas, usted necesita ser capaz de proveer una cantidad apropiada de luz porque de lo contrario las hojas se adelgazan y los tallos se alargan. Las plantas por lo general retienen su color normal aun cuando no reciban suficiente luz, pero raramente producen flores es estas condiciones. Cuando la luz es muy brillante, su crecimiento disminuye y las hojas se ponen pélidas o verde amarillentas. Las hojas son más oscuras cuando están cubiertas por otras hojas y causan que el florecimiento continúe siendo más lento. Las exposiciones orientales y del norte proveen condiciones ideales de luz, aunque la luz filtrada en ventanas del sur y occidentales también son aceptables. Además, las violetas africanas se desarrollan muy bien bajo luz artificial.
Las temperaturas nocturnas para las violetas africanas deben ser entre los 18 y los 21 grados centígrados, y las temperaturas diurnas deben estar entre los 24 y los 29 grados. Con temperaturas más bajas, las hojas de las plantas se oscurecen, se ven como empapadas, y finalmente mueren. Las plantas que son colocadas en los antepechos de las ventanas pueden ser fácil mente dañada s por las condiciones de bajas temperaturas, y pueden llegar a congelarse si ellas están en contacto con los cristales.
Cuando se transplanten las violetas africanas, debe usarse una mezcla de tierra especialmente diseñada para ellas. Como regla general, riegue estas violetas solamente cuando la superficie de la tierra se sienta seca al tacto. Nunca espere hasta que la tierra se endurezca o que la planta empiece a marchitarse. En cada riego aplique suficiente agua hasta saturar la tierra, y asegúrese de tirar el agua excesiva del fondo o plato de la maceta. Para prevenir manchas, evite salpicar agua en las hojas.
La mayoría de los fertilizantes solubles para plantas del hogar son adecuados para las violetas africanas. Aplique el fertilizante de acuerdo con las recomendaciones del fabricante o use su libre albedrío de acuerdo con su experiencia. Como regla general, las plantas deben ser fertilizadas cada cuatro o seis semanas. Si las hojas adquieren un color verde pálido y la planta disminuye la cantidad y calidad de flores, es tiempo de fertilizarla.
Para propagar las violetas africanas, corte una hoja nueva con todo y su rabito y sumérjala en agua tibia. Cuando le broten nuevas raíces, plántela inmediatamente.
