Los insectos harinosos son de cuerpo blanco y suave, que chupan los jugos de las plantas. Estos insectos están cubiertos de unos hilillos cerosos blancos que los protegen de los predadores. Generalmente se los encuentra en las uniones de las hojas con el tallo y a lo largo de las venillas de las hojas que, al alimentarse, causan que las hojas se pongan amarillas y se caigan.
Entre las plantas que, comúnmente, son las más afectadas por los insectos harinosos se incluyen aglaonema, la mayoría de los helechos, algunas palmas, ficus, algunas dracaenas, poto, filodendro, los pinos de la isla Norfolk, cheflera, diefenbaquia, crassula, violetas africanas, streptocarpus y yuca.
Para controlar los insectos harinosos se debe cortar las ramas infectadas y destruirse las plantas infectadas en exceso. Estas pestes también pueden ser controladas con jabón que contenga insecticida. Para combatir grandes infestaciones, debe rociarse una mezcla del 10% de alcohol metélico y el 90% de agua directamente en los insectos. Para una infestación más pequeña, dé unos toques a los insectos con un hisopo humedecido con alcohol metélico. Repita este procedimiento cada semana hasta que los insectos desaparezcan. Asegúrese de probar las mezclas de jabón y alcohol en una pequeña porción de la planta antes de darle una aplicación completa ya que algunas plantas pueden ser muy sensitivas a esos químicos.