La Agencia para la Protección Ambiental de los EE. UU. (EPA, por sus siglas en inglés) clasifica todos los pesticidas en una de dos categorías: uso-general y uso-restringido. Un pesticida de uso-general significa que cualquier persona que pueda leer y entender la etiqueta puede comprar y usar el producto.
Un pesticida de uso-restringido se puede comprar, usar, o usar de diferente manera, solo con una licencia. Las palabras “uso restringido” (restricted use) están escritas en la etiqueta, y el proveedor tiene que solicitar la licencia de compra antes de vender el producto.
El Departamento de Agricultura de Colorado certifica a dos tipos de solicitantes de pesticidas de uso-restringido. Un aplicador privado es una persona que utiliza un pesticida restringido en la producción de artículos agrícolas en campos propios o rentados por esa persona. En Colorado, los granjeros, rancheros, productores de orquédeas y operadores de invernaderos son clasificados como aplicadores privados.
La certificación para un aplicador comercial es requerida para aquellos que reciben una compensación por aplicar un pesticida de uso-restringido en la propiedad de otra persona.
Antes de seleccionar un pesticida, debe considerar los siguientes cuatro puntos para tener éxito en el manejo de la peste a tratar. Identifique la peste. Determine si el número de pestes presente causará una pérdida lo suficientemente grande como para justificar el uso de químicos para controlarlas. Evalúe todas las opciones de control. Y, si el control quémico es el éltimo recurso, elija la sustancia menos tóxica.