Casi todos los árboles frutales caducifolios (manzanos, peras, chabacanos, cerezas dulces y agrias, duraznos y ciruelos) pueden sembrarse en Colorado. Algunos factores importantes a considerar son la resistencia de los árboles, el tiempo que duren adormecidos por el frío, los requerimientos de la duración de la temporada y su susceptibilidad a las enfermedades.
Todos estos tipos de árboles pueden enfrentar hasta los -31,5° C del frío invernal, excepto los duraznos, los cuales se dañan cuando la temperatura está entre los -24 y los -25,5 °C. Es de mucha importancia plantar los árboles en zonas protegidas, donde la temperatura baje gradualmente durante los meses invernales, que tengan temperaturas invernales estables (sin mayores fluctuaciones) y aumentos de temperatura graduales durante la primavera. Las variedades con temporadas de crecimiento cortas a medias son las mejores porque en muchas zonas de Colorado existen temporadas cortas. Entre los riesgos de enfermedades se incluyen Tizón del manzano tanto en manzanos y perales a lo largo del frente montañoso debido a las condiciones templadas y húmedas que favorecen la infección durante la primavera y temprano en el verano.