Muchos se enamoran de las espectaculares flores de Colorado, de aquellas de las tundras de las Rocallosas y desean tener algunas en sus hogares. Los jardines de rocas mezclan las flores con las rugosidades de las montañas.

Para empezar un jardín de rocas, seleccione un lugar que está expuesto a la luz pero que no sea muy caliente. Un lugar que dé al este es ideal. La tierra, por lo general, debe ser mejorada, o mezclada con material orgánico, para hacerla porosa. Una mezcla de tierra superficial nativa con partes iguales de arena gruesa, gravilla y mantillo es una receta común usada en jardines de rocas.

No tenga miedo de ser expresivo. Los jardines de rocas se ven mejor cuando ellos son grandes y toscos, en lugar de ser raquítico y trivial. Todas las rocas deben ser de la misma fuente, pero de diferentes tamaños. Evite colocarlas de manera regular o ponerlas donde caiga. La colocación de las rocas es un arte y el que quiera iniciar un jardín de rocas debería consultar libros sobre el tema, pasar tiempo observando las rocas en su estado natural, y tratar de visitar jardines ya terminados para ver cómo otros los ha arreglado. Los jardines de rocas son incluidos en la mayoría de los recorridos turísticos en el área, y existe una oficina activa de la Sociedad Norteamericana de Jardines de Rocas que pudiera ser una buena fuente de información.

Una combinación de gravilla o de piedrecillas del mismo color de las rocas en el jardín podría ser una excelente combinación en el jardín. Recuerde, un jardín de rocas no es designado para dar un impacto inmediato. Durante el primer año se vera ralo así que plante muchos bulbos pequeños de primavera. Usted se verá gratificado por años con esta sofisticada forma artística de jardín.