El otoño es la mejor temporada para fertilizar los prados de pasto azul de Kentucky en Colorado. Las promociones acerca de “preparación para invernar sus prados” pueden sonar misteriosas, pero no hay nada mágico sobre ello. Simplemente fertilice con nitrógeno una vez a finales de septiembre o principios de noviembre si vive a lo largo de las faldas montañosas, o más temprano si vive en las montañas.
Aplique al menos 373 gramos de nitrógeno por cada 92 metros cuadrados. Si usted va a usar un fertilizante orgánico natural, como por ejemplo abono deshidratado de gallina, usted podría doblar la cantidad. También, doble la cantidad de fertilizantes no orgánicos si usted fertiliza solamente durante esta temporada, o si usted fertiliza tan solo una vez más a principios del verano.
Recuerde que el césped tiene que estar verde cuando el nitrógeno se aplica. También, asegúrese que la tierra está húmeda para que el nitrógeno se disuelva fácil mente. Si no es así, riegue y espere un día antes de fertilizar. Si se aplica fertilizante a la tierra muy seca, fría, o césped aletargado, el nitrógeno no será utilizado eficientemente.
Mientras que el nitrógeno es el nutriente más importante, no se provocará ningún daño si los fertilizantes también contienen algo de fósforo o potasio.
Entre los beneficios de la fertilización otoñal se incluyen el tener un prado más saludable antes del invierno, un sistema de raíces más saludable, y se estimula un prado que se pondrá verde más temprano en la primavera sin que haya un excesivo crecimiento. La fertilización otoñal produce prados primaverales más densos y verdes sin tener que realizar los quehaceres de segado tépicos de una fertilización en la primavera. El proceso debería ser parte de cada buen programa de cuidado de jardines.