Los árboles de piñón son pequeños, unos que crecen relativamente lento. El árbol representativo del estado de Nuevo México, el piñonero, crece en lugares nativos tan norte como Fort Collins, generalmente junto a enebros. De hecho, un área amplia de la región conocida como Four Corners es denominada como bosques piñonero-enebro. Los piñones y madera de esos árboles tienen mucha demanda en esas áreas.
Los piñoneros se adaptan muy bien a los 22 ó 35 centímetros de precipitación anual que recibe su hábitat natural. Cuando estos árboles son usados en los paisajes de Colorado, crece mejor en tierras semi-secas que drenan bien. Los piñoneros son una muy buena elección para paisajes tipo xeriscape. Evite plantar estos árboles en jardines donde es requerido regar frecuentemente.
Aunque el piñonero necesita ser regado varias veces después de ser transplantado para poder establecerse, no puede tolerar riegos duraderos o frecuentes, especialmente en tierras altamente arcillosas. Plante los piñoneros en acotamientos o en áreas secas y evite los lugares bajos y áreas cercanas a las bajadas de agua de edificios.
Bajo condiciones ideales, el piñonero puede llegar a alcanzar los 7,6 metros de altura y los 6 metros de ancho después de algunos años. Los piñones, por lo general, no se desarrollarán a menos que haya varios árboles de piñón en el patio. Los árboles individuales desarrollarán piñones en conos, pero esos piñones estarán vacíos debido a la falta de polen en el aire de otros árboles.