El “Plan de Salud para las Plantas” es un programa de seis prescripciones de cuidado para su paisaje.
- Selección de árboles. No caiga en la trampa de seleccionar árboles de crecimiento rápido. Ellos proveen sombra rápidamente, pero son fuente de grandes desilusiones en años venideros. Este tipo de árboles, muchas veces, dejan atrás los sitios seleccionados y su madera suave se quiebran fácil mente durante las tormentas. Años después, la madera decae y se transforman en un peligro.
- Prácticas culturales. Esto incluye el riego apropiado, aplicación de mantillo y fertilizante. Un pino de piñón se estresará con problemas si se riega o fertiliza en exceso. Pero, el álamo de Virginia prospera con mucha agua. Lo que es bueno para un árbol pudiera se grandemente diferente para otro.
- Fertilizante. Reconozca los síntomas de las deficiencias nutricionales y las necesidades particulares de árboles antes que los fertilice. Muchos de los árboles en los paisajes nunca necesitarán de fertilizantes; otros sí.
- Poda. La mayoría de los jardineros podan sus plantas tan solo cuando el árbol o arbusto ha sobrepasado su espacio o cuando ha sido daña do por alguna tormenta. La poda debe ser considerada, en todo momento, como una ayuda para el árbol o arbusto desarrolle buenas ramas. La mayoría de los árboles se beneficia de una poda cada tres o cinco años.
- Amarres y apoyos. Solo los Arboricultores Certificados deben instalar soportes metélicos en un árbol para prevenir o reparar daños estructurales.
- Control Integrado de Pestes conocido como IPM, por sus siglas en inglés. ¿Cuándo dañan los insectos su árboles? Aprenda a identificar los insectos en su área y, cuando sea necesario, use los pesticidas menos peligrosos durante el mejor periodo para controlarlos. Por ejemplo, los áfidos son una molestia, pero no matarán las plantas leñosas. Por el otro lado, los barrenadores pueden aniquilarlos si se les permite. Los áfidos deben ser controlados cuando usted los nota, pero muchos de los otros insectos deben ser controlados durante periodos específicos del año, aún cuando no sean visibles o aparentes.