Los robles son unos árboles de sombra magníficos, con una forma de hojas y de crecimiento distintivos. Sus frutos son las bellotas, las cuales son de gran atractivo para los animales salvajes. Hay algunas variedades que se desarrollan muy bien en nuestros suelos y clima. Ellos son más caros, pero pocas veces nos decepcionan. Las siguientes variedades son árboles grandes para sombra que alcanzan entre 50 y 70 pies de altura en su madurez.
La copa del roble macroscarpo es redonda y abierta. Es un árbol resistente y vigoroso. Es tolerante a una gran variedad de tipos de suelo y contaminantes de aire. Las hojas son de un verde oscuro y brillantes. Tiene unas ramas de características muy inusuales, y corteza rugosa. El ramaje es excelente para los intereses del invierno. El follaje en el otoño es de un color café amarillento. Su crecimiento va de lento a moderado.
El roble inglés tiene una forma ancha, de copa redonda. Ellos son tolerantes a los suelos altamente arcillosos. Las ramas crecen casi horizontalmente, produciendo una densa sombra. Los robles ingleses tienen un crecimiento moderado una vez establecidos. El follaje en el otoño es de un color café amarillento.
El roble rojo es de crecimiento rápido, con ramas de ancho esparcimiento y copa redonda. Tiene, algunas veces, problemas con clorosis de hierro, lo cual causa que su follaje se ponga amarillo. Esto ocurre frecuentemente cuando se les planta en suelos altamente alcalinos. Un suelo con un pH de menos de 7,5 es recomendado. El follaje en el otoño es espectacular, cuando sus hojas van de un rojo oscuro, a café rojizo y naranja.
El roble blanco de California es un árbol vigoroso y resistente, con una copa ancha y oval. Su crecimiento es similar al roble inglés. Ellos toleran los suelos arcillosos. El follaje es verde oscuro con la parte posterior de las hojas de un color medio plateado. Su follaje cambia en el otoño a un color bronceado-rojizo.
El roble blanco de los pantanos no es recomendado en la mayoría de los sitios de Colorado porque es muy susceptible a clorosis de hierro.
El roble gambel es nativo de Colorado y se ha adaptado a la mayoría de las condiciones de suelo de nuestro estado. A diferencia de los anteriormente mencionados, su forma tépica es la de un arbusto de ramaje méltiple pero puede convertirse en árbol común si se le da agua adicional.
Por lo general, los robles son libres de pestes. Las llamadas agallas, o salientes redondas en las hojas o en sus tallos son repugnantes pero no dañinos para los árboles. No se recomienda ningún tipo de medida.