Los lirios pueden sembrarse con éxito en Colorado. Se presentan en varias formas, colores y tamaños y el follaje como de espadas es atractivo cuando la planta no está floreciendo. Los dos tipos más comunes de lirios que se desarrollan muy bien en Colorado son el lirio barbado y el siberiano. />
El lirio barbado tiene flores con tres pétalos erectos, llamados estándares, y tres pétalos hacia abajo, llamados caídos. Los caídos tienen un centro velloso, y es de ahí que reciban el nombre de barbados. Este lirio barbado se desarrolla mejor en sol total y tierras alcalinas secas, mismas que son las más frecuentes en Colorado.
El lirio siberiano tiene unas hojas más delgadas que las del barbado y tiene pétalos caídos azules, púrpuras y blancos pero sin vellosidad. El cultivo del lirio siberiano es mucho más diferente que el del lirio barbado. El siberiano se desarrolla mejor en tierra húmeda, sol completo y se adapta muy bien cerca a corrientes acuíferas.
El lirio no necesita, relativamente, de muchos cuidados, pero debe ser dividido cada tres o cuatro años. Divida los rizomas, los cuales son sus tallos bajo tierra, después de que las plantas hayan terminado de florecer, pero no más tarde de agosto. Deseche cualquier segmento que esté blando o perforado. Separe los rizomas saludables en segmentos con un grupo de hojas y varias raíces alimentadoras. Corte las hojas posteriores a unos 15 centímetros. Cuando siembre una nueva planta, extienda las raíces en la tierra y posicione la tercera parte superior del rizoma por sobre la superficie de la tierra. Arregle el follaje de manera que estén orientadas hacia fuera, opuestas al centro del grupo.