Una gran parte de las raíces de los árboles se encuentran en los primeros 30 ó 38 centímetros de tierra. Es muy común que las raíces crezcan a lo largo de la superficie de los jardines, lo que hace que el segar, fertilizar y airear el pasto sea difácil.
El eliminar las raíces de la superficie podría dañar el árbol o hacerlo inestable y susceptible a caer en caso de que hubiera fuertes vientos. Las raíces no deben ser cubiertas con tierra porque esto podría afectar la salud del árbol.
Trate de reemplazar el pasto cercano a las raíces con otras plantas de cobertura resistentes a la sombra y que no necesiten ser segadas, o utilice virutas de corteza en el área para ocultar las raíces ; este proceso permite que el oxígeno y el agua se filtren hacia las raíces.