Tan perdurable como el color y la frescura de su fragancia, el espliego, o lavanda, ofrece mucho al jardín de sol completo.

El espliego es una planta originaria de la región del Mediterráneo. Por miles de años, el espliego ha recibido la atención de la humanidad y ha sido seleccionado por su gran variedad de características, las cuales incrementan el valor de la planta en el jardín. Debido a las variaciones de la lavanda en tamaño, hojas y color de las flores, esta planta puede ser usada tanto para crear bordes o puede ser colocada en la parte posterior de dichos bordes. Aunque no es una planta totalmente resistente en nuestra región, ella es digna de un espacio en nuestros jardines.

La variedad enana Nana Alba puede ser usada en bordes; esta variedad llega a alcanzar unos 30 centímetros y tiene un follaje verde y flores blancas. La variedad Munstead, el espliego compacto más popular, es la más fiable en la producción de flores azules un mes antes que otras variedades.

En la mitad de los bordes se puede sembrar la variedad Hidcote, la cual puede llegar a alcanzar unos 60 centímetros de altura, por su contrastante follaje plateado-grisáceo. Si es recortada, esta variedad tiene resistencia en la zona cuatro de la zona de crecimiento de las faldas montañosas. La variedad, Jean Davis, de flores rosáceas, es otra variedad de tamaño medio para sembrar en los bordes.

Las variedades altas también tienen su sitio en los jardines. La variedad Twickel Purple, la resistente lavanda inglesa, es una de las más llamativas por sus hojas grisáceas y sus flores de un color violeta oscuro situadas en largos tallos. La variedad Provenza es un espliego de unos 60 centímetros de altura y de flores de un color púrpura claro que se siembra en los campos de lavanda de una región francesa de donde que toma su nombre.

Cualquier tipo de espliego se desarrolla muy bien en contenedores, y son capaces de producir una fragancia refrescante dentro de la casa. Asegúrese de proveer, al menos, unas cuatro o cinco horas de sol y de mantener la tierra ligeramente húmeda, no saturada.

Durante todo el verano, quite los tallos viejos cuando las flores se decoloran para animar el reflorecimiento. Estas plantas, por lo general, se congelan en el invierno. En la primavera, corte las plantas, dejando solamente un tercio, antes de que los nuevos tallos inicien cu crecimiento. La lavanda puede usarse para crear bolsitas aromáticas y popurrí, así como arreglos decorativos de flores frescas o secas.