Los pastizales son áreas dominantes de las planicies nativas de Colorado. Los pastos o zacates nativos y adaptados se han vuelto recientemente en una adición para los jardines. Los pastos ornamentales añaden dos elementos importantes a los jardines que ningún otro grupo de plantas puede dar. Con la más suave brisa, un jardín con pastos se aviva con movimientos y sonidos.

Los pastos son adaptables a nuevas áreas porque crecen muy bien en tierras pobres. Los hay en una variedad de tamaños, colores, texturas y requerimientos de agua. Los pastos son de gran utilidad en diferentes tipos de paisajes y añaden diversidad a varios tipos de jardines, inclusive a los de rocas, naturales y xeriscape.

Los centros jardineros de Colorado y viveros han incrementado las existencias de pastos para xerojardinería que prosperan con poca o sin agua suplementaria. Entre los tipos cortos de pasto tenemos el festuca azul que es muy popular por sus montículoss de pasto brillante verde-azul. Los pastos avenilla, sand love (Eragrostis trichodes), y mallán son buenos productos para el jardín.

El pasto de la pradera es uno de media altura con un aroma dulce y de un color que va de un dorado a un rojo-anaranjado en el otoño. El zacate escobero es una buena elección para los jardines montañosos por su fortaleza. Toma un color naranja o rojizo en el otoño que dura hasta bien entrado el invierno. Otros pastos de altura mediana son el zacate amarillo indio y el avenilla azulado.

Dos pastos altos para xeriscape que pueden ser recomendados son el pitilla grande, el cual tiene semillas que parecen patitas de pájaro en el otoño y de color anaranjado durante esa misma temporada. Otra variedad es el pasto indio, que tiene cabezas semilleras que puede servir como arreglos frescos o secos.