Algo básico que siempre funciona humorísticamente es un inesperado giro en la historia. Esto es realmente cierto en cuanto al florecido crocus otoñal, el cual impacta a los observadores como una planta en flor familiar, pero en la temporada incorrecta.

Técnicamente, los miembros de la familia de los lirios pertenecen a unas 30 especies de crocus que florecen en el otoño y en el invierno. Las personas que crean formas híbridas se han concentrado en el familiar crocus que florea en la primavera, el cual ahora sobrepasa a las plantas que florecen en el otoño.

El crocus de flor es una joya confiable que seguramente tendrá un buen desarrollo en cualquier jardín. Los camotes, técnicamente llamados bulbos, son plantados durante el corto periodo de reposo en julio y agosto. Todos los crocusmencionados aquí son resistentes a la zona cuatro según el Departamento de Agricultura de los EE. UU. (USDA por sus siglas en inglés).

El azafrán es el crocus más familiar debido a su historial de usos culinarios, colorantes y medicinales. También, es la especie más accesible. Las anchas hojas, de quince a treinta centímetros de largo, crecen por poco tiempo en la primavera para después morir a mediados del verano. En el otoño, tallos con flores pero sin hojas se desarrollan para producir racimos de llamativas flores moradas de unos diez centímetros. También se puede encontrar una variedad blanca.

Entre otras especies de crocus que florecen en el otroño encontramos goulimyi, kotschanus, medius, pulchellus, ochroleucus, y speciosus. Usted puede obtener estas especies menos populares de compañías que funcionan por medio del correo. Es posible que también las pueda encontrar en sus centros jardineros o invernaderos locales.

Plante los crocus de flor otoñales a unos veinte centímetros de profundidad en tierras de buen drenaje en julio o agosto. Añada grava alrededor de los bulbos para evitar el interés de roedores. Debido a que estos bulbos pueden ser plantados tan profundamente, usted puede sembrar otras plantas de cubierta pero que permiten el crecimiento de los bulbos. Cuando las plantas crecen en el otoño, las flores le darán un acento de contraste con el color del follaje.